Cuando
                                    amanece y huyen las estrellas
                                    y en lontananza empieza a clarear
                                    con paso firme, al hombro los esquís
                                    hacia las cumbres nos vamos a esquiar.
                                Vámonos
                                    ya, que el día nace
                                    y el manto blanco solo esta
                                    y si no vamos a poblarlo
                                    que solitario quedara.
                                Desde
                                    el Beret cantamos tu grandeza,
                                    valle de Arán tendido a nuestros pies,
                                    la gigantesca sierra Maladeta
                                    soberbio campo nos brinda por doquier.
                                Y
                                    al descender por las pendientes
                                    ligeros vuelan los esquís,
                                    llenos de gozo y alegría
                                    volamos raudos hacia ti.
                                Cuando
                                    amanece y huyen las estrellas
                                    y en lontananza empieza a clarear
                                    con paso firme, al hombro los esquís
                                    hacia las cumbres nos vamos a esquiar.
                                Vámonos
                                    ya, que el día nace
                                    y el manto blanco solo esta
                                    y si no vamos a poblarlo
                                    que solitario quedara.